El 29 de julio 2024, una gran explosión y el posterior incendio devastaron una planta clave en el complejo químico Ludwigshafen de BASF en Alemania. Esta planta desempeña un papel fundamental en la producción de ingredientes aromáticos y precursores vitales de compuestos relacionados con la nutrición animal, como las vitaminas A, E y carotenoides. El incidente causó importantes daños estructurales y operativos, lo que provocó el cierre inmediato y la declaración de fuerza mayor por parte de BASF para estos productos esenciales.
Las repercusiones del incendio se han extendido en cascada por los mercados de ingredientes de nutrición y aromas, lo que pone de manifiesto las vulnerabilidades de la cadena de suministro mundial.
En un excelente ejemplo de comunicación de crisis, BASF ha habilitado una página web específica en la que va informando sobre el progresivo restablecimiento de su fabricación de vitamina A , vitamina E, carotenoides y aromatizantes

En base a la información facilitada por la propia BASF en su página web habilitada, la compañía confirmó que ciertos ingredientes aromáticos, incluidos Pyranol, Methylionone 70 y DL-Menthol FG, están programados para reiniciar la producción en la última semana de octubre de 2024. Está previsto que los volúmenes de asignación de estos productos se comuniquen en la segunda quincena de noviembre. Sin embargo, otros ingredientes aromáticos solo volverán a estar en línea gradualmente entre abril y junio de 2025.
El plazo de recuperación de los productos relacionados con la nutrición es aún más prolongado. Se espera que la producción de vitamina A se reanude en abril de 2025, mientras que la vitamina E y los carotenoides lo harán en julio de 2025. BASF ha advertido que incluso después de que se reinicie la producción, se necesitarán varios meses para reconstruir los niveles de inventario y restaurar la disponibilidad total en el mercado.
La importancia de blindar y diversificar las cadenas de suministros en la nutrición avícola
Esta disrupción pone de relieve la necesidad crítica de contar con planes de contingencia dentro de las industrias de la nutrición y la seguridad alimentaria. En septiembre 2024 se pusieron de manifiesto los riesgos más amplios de estas interrupciones de la cadena de suministro, como la volatilidad de los precios y la limitada disponibilidad de productos, lo que estimuló el debate sobre la importancia de las estrategias de diversificación y mitigación de riesgos. Para los nutricionistas y formuladores de piensos para avicultura y para producción animal en general, esta situación plantea desafíos para mantener los suministros en los suplementos y disponer de cadenas de suministro blindadas para elementos críticos como son las vitaminas esenciales.
Si bien las actualizaciones proactivas de BASF brindan transparencia, los retrasos prolongados ponen de manifiesto la fragilidad de las cadenas de suministro globales de vitaminas y carotenoides esenciales. Los profesionales de la industria de la nutrición deben prepararse para la continua volatilidad de los precios y los posibles desafíos para obtener estos ingredientes clave. Es un recordatorio oportuno de la importancia de contar con una sólida planificación de contingencia para mantener la estabilidad en la seguridad nutricional ante accidentes imprevisibles como este que han ocurrido y ocurrirán.